¿Alguna vez se preguntó por qué los resfriados y otras infecciones respiratorias son cuatro veces más comunes durante el invierno que en verano? El clima frío es el principal culpable -los virus pueden sobrevivir más tiempo fuera del cuerpo cuando las temperaturas se reducen- sobreviven en las manijas de las puertas, tejidos y otras superficies durante al menos 24 horas. La inhalación de aire frío reduce las respuestas inmunológicas dentro del revestimiento nasal. La falta de sol disminuye sus niveles de vitamina D, lo que también perjudica la inmunidad y, por supuesto, pasamos más tiempo encerrados juntos en el interior como para que las infecciones se puedan propagar.
Sin embargo, exponerse a los virus del resfriado no significa que tiene que sucumbir. Si su sistema inmunológico está funcionando a su máximo rendimiento, puede ignorar los cientos de virus que causan el resfriado común sin que se desarrollen síntomas significativos.
Comer saludable
Una dieta nutritiva suministra las vitaminas, minerales y antioxidantes necesarios para que los glóbulos blancos combatan bacterias invasoras y virus. Ahora no es el momento de escatimar sus cinco frutas y verduras diarias.
Si no come mucho, o come cualquier carne, es importante asegurarse que no le falte el hierro. La deficiencia de hierro es común y como son necesarios los glóbulos blancos para sus respuestas inmunes que matan a microbios, esto puede aumentar su susceptibilidad a los resfríos.
Los hongos shiitake son ampliamente recomendados para incrementar la inmunidad, y la investigación ha demostrado que contienen una sustancia lentinan, que estimula la actividad antiviral de los glóbulos blancos.
Opte por el yogur
Comer un pequeño vaso de yogur Bio o tomar todos los días un suplemento probiótico, ayudan a mejorar la inmunidad. Las bacterias probióticas estimulan a las células inmunitarias en el intestino para aumentar la producción de anticuerpos IgA -del tipo que se encuentra en espera para revestir al intestino y al tracto respiratorio que protegen contra las infecciones. Las bacterias probióticas también segregan antibióticos naturales (bacterias como acido philus y bulgaricus) y estimulan la producción de interferón, una sustancia antiviral natural producida por algunas células inmunes.
Vitamina D es la clave
La falta de vitamina D es reconocida cada vez más como el conductor que experimenta síntomas de resfrío durante los meses de invierno cuando hay muy poca luz UV para desencadenar su síntesis en la piel. La investigación que involucró a más de 19.000 adultos demostró tener un bajo nivel de vitamina D que aumenta su riesgo de desarrollar el resfriado común en un 36% comparado con aquellos de niveles óptimos. Son suplementos que vale la pena considerar en esta época del año.
Aleje los resfríos con vitamina C
La vitamina C es uno de los nutrientes más potentes que inmuniza el sistema, se encuentra en forma natural en las frutas y verduras. Tiene acciones antivirales que suprimen la copia de genes virales para que los síntomas sean menos propensos a desarrollarse. Estudios que involucran estudiantes y niños en edad escolar han descubierto que la vitamina C puede reducir el riesgo de contraer resfriado hasta un 30%. Las dosis usadas en los ensayos están en el contorno de 600 mg a 1g diario, sin embargo, es más de lo que normalmente se suministra durante la dieta. Los suplementos de vitamina C están ampliamente disponibles.
Apoyo para la Inmunidad
Varias hierbas medicinales son eficaces para prevenir y curar el resfriado común.
Extractos de baya de saúco contienen sustancias antivirales naturales que reducen la gravedad y duración de las infecciones respiratorias, incluida la gripe. Esta es una de las razones del por qué la mermelada y el vino de saúco fueron remedios caseros populares durante siglos. La investigación moderna sugiere que el extracto de saúco mejora significativamente los síntomas de la gripe con recuperación completa entre 2 a 3 días en comparación con 6 días para aquellos que no toman el extracto de saúco.
El ajo contiene una serie de sustancias antivirales y anti-infecciosas que ayudan a combatir virus y bacterias, así como aumentar su actividad en las células inmunes. El ajo negro es especialmente beneficioso, ya que contiene niveles más altos de antioxidantes y produce menos olor haciéndolo más aceptable socialmente ¡en espacios limitados!
Propóleo, es un antiséptico de miel natural producido por las abejas para mantener su colmena libre de infección. Contiene bioflavonoides con una acción antibacteriana y antiviral que ayudan a mantener a raya las infecciones de invierno.
Equinácea, es una medicina herbal tradicional que aumenta el número y la actividad de los glóbulos blancos que combaten las infecciones. También aumenta la producción de su propia sustancia anti-viral natural del cuerpo, el interferón. Equinácea puede tomarse en dosis bajas a largo plazo para reducir las infecciones, o en una dosis más alta justo cuando se siente que llega una infección. Siga las instrucciones de los paquetes, ya que varían según las marcas.
Ginseng siberiano, es un potente estimulante inmune que funciona de manera similar a la equinácea. La investigación rusa sugiere que quienes lo toman regularmente tienen un 40% menos resfríos, gripe y otras infecciones, y pierden un tercio de menos días de trabajo, comparado con aquellos que no lo toman. Es genial para que vuelva a la pista durante la convalecencia.
Pelargonium, es de lejos el tratamiento natural más eficaz si golpean los síntomas del resfrío. Es más efectivo que cualquier prescripción médica, y no estaría sin él en mi gabinete de primeros auxilios. Los extractos de raíz de Pelargonium sidoides – un geranio sudafricano – tienen acciones antivirales y antibacterianas, estimula la limpieza del moco infectado. Si se inicia lo antes posible durante un resfriado, los síntomas suelen desaparecer en 24 horas. No obstante, continúe tomándolo durante 3 días, o la infección regresará. Pelargonium se puede utilizar para curar resfriados comunes, dolor de garganta, tos, laringitis, bronquitis y sinusitis.
Los mejores consejos para ayudar a prevenir el resfriado:
Reduzca sus niveles de estrés
No permita cansarse
Haga ejercicios regularmente para mantenerse en forma
Evite fumar y las atmósferas ahumadas
Lávese las manos regularmente – higiene es la clave
Considere la posibilidad de usar rociadores antivirales de mano y pañuelos antivirales
Evite tocarse la cara/ojos/boca con las manos, ya que esto puede introducir virus del resfrío a través de membranas mucosas vulnerables
Evite a la gente durante las primeras etapas de un resfriado, especialmente cuando tosen y estornudan.
Beba té verde – sus antioxidantes parecen ayudar a proteger contra las infecciones virales
Ponga unas gotas de aceite esencial de hierba buena o té en un difusor para dar buen olor a la habitación y ayudar a mantener a raya la tos y resfriados.
Piense positivamente – los estudios muestran que una actitud positiva puede aumentar inmunidad y reducir el riesgo de infecciones.
Tome a broma sus síntomas – quienes se ríen regularmente parecen ser más saludables que otros, y tienen menos infecciones que quienes se enojan con facilidad.
Via lagranepoca.com
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