Salud es vivir mejor

Uno de los males que aqueja a las mujeres de todas las generaciones es la depresión. Muchas veces nos sentimos “diferentes” y no sabemos el motivo o en dónde, exactamente, radica esa sensación o sensaciones que no logramos precisar.

Popularmente se habla de depresión cuando una mujer llora sin motivo aparente, pero los síntomas pueden ser diversos y pasar desapercibidos. Incluso pueden camuflarse por algo más y desviar la atención del verdadero problema. Estos son algunos de los síntomas más notorios de la depresión:

    Fatiga o cansancio permanente.
    Dolores que se sienten pero no tienen ninguna raíz o motivo.
    Antojos constantes de dulces y carbohidratos.
    Dificultad para mantener el control de las comidas.
    Ansiedad permanente que no se aplaca con nada.
    Mareos.
    Irritabilidad y arranques de ira propiciados por las situaciones más sencillas.
    Falta de energía.
    Insomnio.

Los métodos para superar la depresión varían dependiendo de la gravedad y de la persona que la sufra, pero algunas veces la situación se complica con otras condiciones de mayor gravedad que deben ser tratadas con más cautela, por profesionales en el área.La depresión también puede estar ligada a una serie de percepciones que tenemos las mujeres sobre nosotras mismas, que pueden contribuir a un decrecimiento de la autoestima o amor propio.

Cuando se trata de un”episodio pasajero”, como es el caso en muchas otras situaciones, hay algunos remedios sencillos que podemos poner en práctica para devolverle la estabilidad a nuestra salud emocional.

    Camina durante 20 minutos al aire libre. No es ningún secreto que el ejercicio libera endorfinas, y estas hacen que nos sintamos mejor con nosotras mismas.
    Mantente en lugares iluminados. Abre las ventanas y cortinas de tu casa durante el día para que entre la luz del sol.
    Desempeña actividades que impliquen movimiento y alegría, como bailar al ritmo de una canción o sencillamente cantar.
    Come chocolate negro. Puede sonar como un cliché pero comer chocolate negro es una antidepresivo conocido, porque ayuda de combatir el cansancio y la fatiga.
    Activa tu vida social. Únete a un club, sal con tus amigas, o haz nuevos amigos. No te quedes encerrada en tu casa y mucho menos en la rutina.
    Cumple con tus horas de sueño. No te trasnoches ni luches contra el sueño; duerme cuando sientas que es necesario. De lo contrario esto puede desencadenar insomnio.
    Activa tu imaginación. Soñar despierta puede hacerte parecer despistada pero se ha comprobado que es un buen ejercicio para la mente, activa el cerebro y mantiene la autoestima.
    Comer fruta dos veces al día contribuye a que seas una persona más felíz.
    Regálate un cariñito. Date un día de Spa y consiente tu cuerpo; los masajes son el mejor regalo que te puedes dar. Te relajarás y verás que todo no es tan malo como parece.
    Toma vitaminas. Te proporcionan energía y ánimos para continuar el día.

Via tipsfemeninos.com